Apr 19, 2010

propuesta II


te propongo:
reflejarte cristalino en mi mirada
sin mayor accesorio que tu imagen
al instante generada, espontánea

te propongo:
deslindarte de ayeres y mañanas
de aciertos o errores cometidos
de definiciones o etiquetas proferidas

te propongo:
no jactarme de haberte descifrado
permitirte renacer cuánto prefieras
darte a luz en cada parpadeo

Apr 18, 2010

¿mucho o muy poco? II


¿Y
dónde está la verdadera libertad al amar?, ¿el acto de deshacerse de todo deseo de manipulación, de control, de posesión... hasta de satisfacción? ¿No es acaso la libertad al amar la máxima satisfacción en sí misma, aunque todos o cualquiera del resto de los elementos mal considerados "comunes" en el amor estén en segundo término o hasta ausentes? ¿No sería ésta la fórmula alquímica para hacer al amor inmortal, sublime, etéreo... y aún, humano?

...y no sólo deshacerse del deseo de poseer al otro para satisfacer un deseo propio, sino de creer que uno puede satisfacer en el otro ése o cualquier otro vacío.

-Pero es que eso no es posible en el día a día...- decía - la dinámica se complejiza, se levantan reclamos, exigencias, se asignan roles, labores... Es muy posible, pensé. Pero, esos roles, ¿de dónde vienen? ¿De las construcciones sociales? ¿Los dictaminan los otros, el entorno, la familia, la sociedad, el mundo? Me es inevitable sentir que hay un grado de traición al relámpago de inspiración que nos hace comprender qué es el amor libre, cuando se le encasilla en roles tales. Una falta de coherencia para con un ideal comprendido.

La fuerza del conciente, de la automatía, de la cotidianeidad, ¿quizá? Y si en efecto esta fuerza se va colando por las rendijas y gana algo de terreno, ¿qué será lo que decidamos -de todo lo que compartimos- que vale la pena para confrontarnos?, ¿qué será meritorio de la confrontación, de la exigencia, de la molestia? ¿Qué merecerá nuestra insatisfacción? No me molestaré si haces esto, pero si haces esto otro, entonces sí me molestaré. No me molestaré si dejas de hacer esto, pero si dejas de hacer esto otro, entonces sí me molestaré. Y no hablábamos de lavar los platos.

Llegamos a un rincón anguloso. Todos tenemos escalas de valores. Quizá en el momento en que las escalas de valores sean incompatibles será el momento de la confrontación. Cuando ser fiel al otro represente traicionarse a uno mismo. Sin embargo, hay una salida a este aparente túnel sin salida: la comunicación. Si el valor primordial es la vida, si le sigue la libertad y sigue entonces el amor, lo que se trate en la conversación siempre apelará a un nivel mayor de entendimiento, el de el amor libre que ante todo respeta la vida. En este contexto no se me ocurre algo más grande que irrumpa en la paz de la relación. Hay otros altos valores, claro, pero no me parecen de naturaleza inmutable como los anteriores.

Pero la contundencia no era el objetivo del argumento. Yo hablaba desde la teoría... él hablaba desde la práctica.

Apr 17, 2010

¿mucho o muy poco? I


Pusimos sobre la mesa la cuestión, ¿se necesita mucho o se necesita muy poco? Me miraba intrigado, ¿a qué te refieres con "mucho o poco"?.. no es una cuestión de cantidad... Sé que no es una cuestión de cantidad, quizá es mi manera pobre de referirme a la voluntad, y a la vez a la complejidad, es decir, ¿es simple o es complicado?

Mi teoría es, si cada individuo tiene una historia consigo, una serie de experiencias que lo hacen complejo y actúa en función de ellas, de lo que ha aprendido que le funciona y lo que no, y así se desenvuelve por la vida, esa complejidad no es cuestionable ni modificable... Ese bagaje que todos tenemos no se va a transformar por convivir con otro bagaje. Es mera adaptación, casi adaptación hipócrita, superficial, consensada... Y del otro lado lo mismo, la otra persona, con su complejidad, se presenta a escena y se adapta en lo posible, pero no cambia en esencia, no habrá crisis ni revoluciones, cuestionamientos ni mutaciones, producto de la convivencia... Entonces, para que dos convivan en pareja, ¿se necesita mucho o se necesita muy poco? ¿Son simplemente las dos complejidades ahí, respetándose y dejándose ser, en cuyo caso se necesita muy poco?, ¿o es quizá un cúmulo de ediciones y manipulaciones, de sacrificios y tolerancias, para evitar que el proyecto se desmorone, en cuyo caso se necesita mucho?

¿Y no es el tiempo acaso una variable fundamental?, ¿no hay un momento en la vida en que la complejidad individual no está a lugar en la discusión: la madurez?, ¿no es cada individuo responsable de sí y de sus mutaciones, si es que ocurren del todo? ¿No hay siempre plena conciencia de que la confrontación que "el otro" activa es al fin y al cabo una confrontación con nosotros mismos?, ¿y no por ende todas las confrontaciones nacen y se resuelven -o no- en nosotros mismos?, ¿qué tiene que ver "el otro" en todo esto, más que en estar presente y activar estos procesos con su mera presencia? Entonces, quizá: se necesita muy poco.

¿Y qué hay de los demonios?, rebatía. Cuando se encuentran los demonios de uno con los del otro, entonces ahí es el acabose. ¿Cómo vas a controlar eso? Es cierto. Aquellos que ni siquiera podemos traer al conciente, esos que tienen vida propia y a la sombra de los cuales vivimos. Pero de nuevo argumenté, ¿pero esos demonios, suponiendo que afectan al otro, lo hacen de forma personal?, es decir, ¿uno puede tomarse personal el que los demonios del otro le afecten?, ¿no acaso nada es personal en pareja?, vaya, ¿hay algo personal en la vida, si consideramos que vamos cada individuo relacionándonos con el mundo en función de nuestras experiencias y no en función de los otros?

... y en estos interesantes devenires nos consumíamos la noche y las copas.

palabras más, palabras menos

.

Voz profunda, estatura justa, cabello voluptuoso, rostro noble, risa frondosa, sentido del humor seductor, caricia cortés.

Corporeidad: (sust. f.), integración permanente de factores psíquico, físico, espiritual, motriz, afectivo, social e intelectuales que constituyen una única entidad.


Corporeidad coherente, espiritualidad esférica y multidimensional, naturaleza inasible, óptimo pendular estacional*, sabiduría mutidisciplinaria -gran reserva y siempre mutable-, cotidianeidad plena -auténtica y frugal-, generosidad y ataraxia, pletórico caminar consecuente con las inquietudes, estilo de vida espartano y simbólico, aproximación epicúrea a la vida, sin evasiones, ecléctico habitante del multiverso, iconoclasta audaz y respetuoso.

Libre y compasivo en balance dinámico, presentes e indelebles las lecciones, apasionado compromiso con el futuro de los posteriores, ausencia de explicaciones ante la ausencia de solicitudes, coherencia indistinta de interlocutor o escenario, sólida y humilde confianza en sí, fresca galantería, los cuestionamientos siempre presentes, recordatorios de austeridad y posibilidades, poderoso por afectivo, seductor por cuidadoso.

"...nuestra corporeidad está presente aún cuando nosotros no lo estemos físicamente..."

*fotosíntesis emotiva.

Apr 15, 2010

sin la forma


Qué delicia quedarme sin palabras. Qué maravilla no saber cómo decir nada, no poder elegir un argumento, un punto de vista, la justificación de un relato siquiera. Qué deleite verme superada por un cúmulo de energías, sin poder dominarlas, sistematizarlas, categorizarlas, expresarlas ordenadamente y someterlas al menos a eso, a las palabras. Qué placer estar presente en este instante de creación espontánea, de indefinición, de ausencia de referencia, de significante, de tiempo. Qué grato verme con las manos vacías después de buscar palabras para un poema que se acerque a describir este momento.

Apr 14, 2010

instante


r
ecordé. me mordí la piel de los dedos, abstraída con el recuerdo. fijé la vista en estas letras, sin leerlas. ése, el instante en que el dios se hizo hombre. sin fuerza, una sensación lo invitó a doblegarse. y -como quién tímidamente se rinde- se balanceó con dulzura terrenal. ahora, como entonces, mi corazón late fuerte y se encienden mis mejillas.

Apr 13, 2010

no cualquiera V


Conocí a un hombre. 51 años. Alto, soltero, de voz grave. Inteligente, sensible, profundo. Filósofo pielroja. Místico deportista. Sabio aventurero. Relámpago etéreo. Antes que de él, me enamoré de su biblioteca. Definitivamente éste era extraordinario. Ante su evolución, me quedé muda y sólo atiné a disfrutar de su compañía.

Apr 7, 2010

Río


Soy ejército sutil de burbujas emergentes
soy el zumbante viaje de abejas con batido
soy calorcillo interno de emoción secreta
soy la mueca tímida de esperanza y alegría

avalancha silenciosa aproximándose lejana
con inquebrantable fuerza y recta trayectoria
soy cápsula flotante entre esclavos con grilletes
sonrisa exasperante ante todo lo irritante

soy de soledad la imaginación acompañada
en silencio escuchando las cigarras y soñando
festejando este momento, este segundo sólo
en que tengo la sospecha de no estar esperando

no temí


... es que esos días no pensé, no razoné, no analicé, no meta-analicé, no discutí, no discerní, no confronté, no temí.

Robando la frase de ese hombre maravilloso:
"Conjuré a los astros, y me obedecieron."

Apr 5, 2010

evanescencia


No puedo comprender cómo, pero se va yendo. Desaparece un poquito más, cada segundo. No puedo detener el proceso, porque no lo entiendo. No es cosa de escuchar de nuevo lo escuchado, no parece surtir ningún efecto el recordarlo. Pero no soy ésa, no sé cómo lo fui, cómo ese par de días me pareció lo más natural, lo que siempre había sido, lo que siempre debió ser. Pero no siguió siendo. Me voy tornando lo que fui antes de ello, el miedo y la desconfianza van retomando su terreno. Pero, ¿miedo a qué?, ¿no en ese momento me fue claro que el miedo estaba infundado? Está infundado, pero opera por sí sólo. Es miedo a descubrir que he hecho el miedo más fuerte que yo. Y ese camino es muy oscuro... No quiero regresar a ese lugar, cuando me parecía que la tristeza era cool y que la melancolía por lo que nunca fue era lo único honesto qué sentir. Tengo que vencerme, tengo que dejarme salir, tengo que dejar de pensar, tengo que retirar el filtro. ¡A la mierda con el miedo! Hay una vía, quizá: el arte. Escribir, pintar, ¿tal vez bailar? Hubo un tiempo en que escribí, pinté y bailé como si fueran lo único que daba sentido a la vida. ¿En qué momento decidí cercenar esa naturaleza?, ¿por qué no puedo volver a ella voluntariamente? ¿De qué tengo tanto miedo? Ya había olvidado cómo se sienten las ganas de llorar.

Apr 3, 2010

fin ciego


C
ayeron mis palabras en tus ojos
en tus ojos de pozo largo y negro
negro caer hasta el fondo sin eco
sin eco cayeron mis palabras en tus ojos

Pendulé mis palabras a tu alma
a tu alma liberé el peso del hilo
mecíose el hilo con retorno mudo
retorno mudo a mis palabras de tu alma

Lancé mis palabras a tu boca
a tu boca dirigí veloz la travesía
travesía veloz de voz sin inflexión
inflexión ausente de tu boca a mis palabras

Apr 2, 2010

la ventana


Me gusta esa ventana, siempre abierta, permanente y plena, enfrentando el sol de la tarde y mirando el tiempo. Miro la cortina, blanca y llana, sin declaraciones ni tendencias. El viento, a su paso, se encuentra con el cristal, el cemento y el vacío, libre, indiferente. Me gusta el vuelo de la tela, errático, natural, arbitrario. Me sorprende muy gratamente sentir algo al verlos, como una obra de arte, emocionante. Me inspiran un agradable sentimiento, el de la simpleza de las cosas, la ausencia de control, la libertad, la indiferencia, la causa-efecto autónomos en una imagen, la belleza de la idea, el mensaje secreto y sabio escondido en una escena más bien intrascendente.